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miércoles, 7 de septiembre de 2016

Pura Vida ( Peninsula de Osa )

Costa Pacífica de Costa Rica



Al dejar La Fortuna nos dirigimos para Puerto Jimenez así que en el camino pudimos conocer las playas de la Costa Pacífica costaricense, el recorrido en carro es fantástico pues gran parte de la ruta puedes ver el mar y seleccionar la playa que más te guste, hay pequeñas playas rocosas en donde el color del agua de mar es precioso.

Decidimos hacer  una escala en Jacó, una de las principales playas visitadas por surfistas de todo el mundo. En el mes de Mayo las olas están ideales para practicar con Longboard. Esta localidad cuenta
con cientos de hostales y hoteles pequeños, los negocios están repletos de anuncios con temática surf. El ambiente y el ánimo es de pura buena energía, la playa super limpia como la mayor parte del país, la arena es oscura con piedritas diminutas sin embargo el agua tiene una temperatura agradable, solo estuvimos acá por una hora ya que el trayecto es largo para llegar a nuestro destino.



Puerto Jimenez





Este es el último punto de escala antes de llegar a Península de Osa, entre tantos hoteles nos decidimos por "La Choza del Manglar" como indica su nombre, el lugar donde se ubica es una pequeña reserva entre manglares e inmenso arboles, en la mañana puedes escuchar diversas aves y con suerte ver monos capuchinos comiendo entre los jardines del mismo hotel. Para llegar a las habitaciones hay que atravesar un puente entre los manglares por lo que ves muchos cangrejitos y aves. Es una buena opción para descansar y convivir con la naturaleza, por la noche al apagar la luz se perciben cientos de sonidos de insectos y de mañana se escuchan las guacamayas. Debido a que solo pasamos una noche aquí, no tuvimos oportunidad de recorrer el lugar. Si quieres realizar un recorrido guiado en la reserva de Corcovado, aquí vas a encontrar varias agencias disponibles.

Reserva Natural Corcovado



Partimos temprano de Puerto Jimenez pues para ver animales hay que salir a la hora en que ellos salen a buscar alimento o los reptiles salen en busca del sol, ademas no queríamos que nos agarrara la lluvia. Hay dos opciones, la primera es un amplio camino directo de terraceria que te conduce hasta la localidad de Carate, el otro es más angosto, cruza por la selva y más tardado, elegimos la segunda opción pues nuestro objetivo era ver y fotografiar la mayor cantidad posible de animales y con mucha suerte esperabamos ver un jaguar.

Descubrimos que a pesar de ser una de las reservas naturales más importantes de Centroamérica, la intervención humana no podía faltar, pues te encuentras con maravillosos paisajes aparentemente aislados con grandes cantidades de ganado y pequeñas poblaciones; en el camino nos encontramos con monos araña, monos capuchinos, tucanes, guacamayas y con gigantescos arboles de varios metros de altura. Atravesamos por huertos de mango y cuando el camino se iba poniendo más interesante nos topamos con un inmenso tronco que bloqueó nuestro camino, pensamos en moverlo pero, no contabamos con las herramientas.

Sin embargo eso no nos detuvo pues estabamos empeñados en encontrarnos de frente con un jaguar, así que cerramos bien el auto, llevamos todo lo necesario: agua, botiquín, repelente de moscos y por supuesto cámaras fotográficas.  Caminamos un par de kilometros y justo cuando decidimos volver encontramos un simpático perezoso alimentándose de termitas, estaba tan cerca que pudimos tomar fantásticas fotografías.

Después de contemplar por unos minutos la tranquilidad del lugar, la sensación de internarse solos entre la naturaleza con nada mas que los sonidos de la selva, decidimos volver a nuestra ruta hacia Carate.

Carate



Al atardecer llegamos al hotel. Este es el ultimo punto al que puedes llegar en automovil, cruzando el río Carate, debes iniciar el recorrido a pie. Si has reservado hospedaje dentro de La Leona, el Lodge se encarga de llevarte junto con tu equipaje. Nosotros teníamos pensado recorrer el Parque Nacional por nuestra cuenta, sin embargo, hablando con personas locales nos recomendaron no salir de los senderos ya que se han presentado varios crímenes en la zona; vimos un anuncio sobre un muchacho americano extraviado el año pasado. La historia fue que le pagó a una persona que no estaba certificada como guía para internarse entre la selva, pues planeaba filmar un documental. El chico nunca regresó y se piensa que el tipo al que contrató lo asesinó o que se topó con algo o con alguien a quien no debió haber visto, el rumor es que sus restos están enterrados en el corazón de la selva; han realizado expediciones en su búsqueda sin éxito.

Aquí hay oreros, estos se dedican a internarse de manera ilegal en la selva en búsqueda de oro, existe la creencia de que todo el corcovado esta repleto de oro, por lo que además de hacer minería ilegal, también matan animales de la reserva para subsisitir.  Hace tiempo se dio el caso de un par de extranjeros  que diseñaron un artefacto para localizar oro, así que algún ventajoso se entero de que realizarían una expedición para probar el invento y los mataron; nadie sabía nada de su paradero hasta que una pareja que se encontraba romántica en la playa, al esconderse entre las rocas, descubrieron los cuerpos descuartizados de los inventores en bolsas negras enterradas entre una pared de rocas artificiales.

Y fue así como replanteamos nuestra intención de explorar la selva por nuestra cuenta, lo mejor es contratar un guía certificado de Puerto Jimenez, algunos hoteles de Carate como el Lookout Inn también ofrecen este servicio.

Si tienes planeado acampar en Carate, es importante que cuentes con las provisiones necesarias para los días que pienses quedarte ya que aquí no hay mas que una pequeña tienda cerca del acceso a la Reserva de Corcovado antes de cruzar el río Carate.

Con esto concluimos la expedición por Costa Rica que me ha dejado con ganas inmensas de regresar, considero este un país de extraordinaria belleza cultural y natural, una joya pues los mismos habitantes son conscientes de lo que tienen y protegen la biodiversidad además de tratar al turismo de la manera más hospitalaria posible; en un hecho que voy a regresar.





"The world is a book and those who don't travel only read one page" ~ Saint Augustine